La Plataforma de Afectados por la Hipoteca o PAH es una asociación y movimiento social por el derecho a la vivienda digna surgido en febrero de 2009 en Barcelona y que actualmente está presente en toda la geografía española. La Plataforma surge en el marco de la crisis inmobiliaria, que surge como consecuencia de la burbuja y de las posteriores protestas.
La principal reclamación de este colectivo es la dación en pago. Es decir, la entrega de la vivienda para la cancelación de la deuda hipotecaria en caso de residencia habitual y deudores de buena fe. En junio de 2010, la PAH y el Observatori DESC trasladaron al Congreso una propuesta de modificación de ley que fue rechazada por Partido Popular y Partido Socialista. La voz organizada de los afectados ha conseguido sumar a colectivos sociales y organizaciones sindicales y ha puesto en marcha una recogida de firmas y llevar de nuevo la propuesta de la PAH al Congreso de los diputados.
Durante unas semanas fueron comunes, actos de protesta en forma de escrache, una palabra que se puso muy de moda, a los políticos del Partido Popular. Sin embargo, diversos medios así como el gobierno emprendieron una campaña de desprestigio contra los escraches que redujo el apoyo popular a esas protestas (que inicialmente se situó por encima del 70%).
Tengo que reconocer que estuve participado en muchas de esas manifestaciones contra las hipotecas abusivas. Siempre recuerdo que pedimos estas camisetas originales a la web Fanisetas, en una de ellas salía la familia de Los Simpson reclamando su casa, y nos presentamos en la Puerta del Sol para protestar. Todos tenemos nuestra época joven y rebelde, ahora, casi cinco años después, reconozco que ése no era el camino. ¿Por qué? Pues porque al final te das cuenta de que todo está politizado.
Un ejemplo que se ve en Pablo Iglesias. Un personaje que nació con frescura, con ingenio con desparpajo y que después de unos años y de conocer lo que es el poder y la política ha pasado a ser, eso que el tanto criticaba, es decir casta. Ha pasado de decir que era comunista a ser socialdemócrata, de decir que no pagaría la deuda externa a someterse a lo que le dicen desde la Unión Europea. Por estas cosas pienso que al final son los mismos perros con diferentes collares.
Casos de desahucios
La pregunta es si tanta protesta sirvió de algo. Sinceramente, y una vez que estás dentro conoces muchos casos. Por ejemplo, el que nos llega a todos al corazón es el de esa pareja que con dos hijos compró un chalé con todo lujo y ahora les ponen en la calle por no pagarlo. Claro, hay que saber que ese marido era albañil, cobraba en la época buena del boom más de 2.500 euros, mucho de ello en negro, y podía permitirse eso. Hay que preguntarse dónde tenía la cabeza ese muchacho para meterse en una vivienda de esas características.
O por ejemplo, el caso de un hijo que puso de aval la casa de su madre, ahora no puede pagar su vivienda, y claro, el banco embarga ese bien, ante la incertidumbre que eso supone. En este caso, quién es peor, el banco o ese chico que pone en riesgo la casa de su madre ganada con tanto esfuerzo. Dejo la pregunta en el aire.
